Palabra
cazada: auto- (formante)
Dice Lázaro Carreter:
“Junto a los modernos inovadores, están los diestros en anteponer el
formante auto- a otra albarda ya
puesta, porque consideran escaso el se reflexivo; ‘Un periodista colombiano se ‘autoexilia’,
escribía en titulares hace poco un diario madrileño; y, aún hace menos, otro,
en el mismo medio, enarbolaba el verbo con idéntico garbo; ‘Bono se autopostula candidato a la Secretaría
General’. Recuérdese que, en los comienzos de la transición, se habló mucho del
autosuicidio de las Cortes
Franquistas, y que, en aquellos momentos, las reuniones conspiratorias o
disidentes del régimen se autoconvocaban:
ningún grupo habría reconocido a otro autoridad para convocar, y lo hacía la
reunión misma por arte de birlibirloque. Con estos precedentes, los auto- antedichos revelan poca audacia;
cabe esperar pasos más decididos; que alguien se atreva a decir, por ejemplo,
‘no me autoconfío’, por ‘no confío en
mí’ o ‘se ha autoenamorado de la
jefa’ queriendo significar que no arrulla por interés, sino que el amor le ha
brotado de la entretela.”

Imagen:https://www.google.com