viernes, 28 de junio de 2019


Palabra cazada: querido

Dice Lázaro Carreter:

“Porque ¿no es lógico llamar también ‘querido’ o ‘querida’ a quien se quiere? Y así se dijo durante siglos. Esta voz y ‘amante’ se huicieron genelas en ambas orillas del idioma, con un distingo: las gentes bien comidas, era lo normal, podían tener ‘amante’ y también ‘querido’ o ‘querida’; los pobres, sólo esto último, aunque a mucha honra. Un peón amante de una planchadora hubiese resultado exótico: eran ‘queridos’.
Ocurre, sin embargo, que las dos palabras viven pero jubiladas desde hace unos treinta años; se puede decir que poseen ‘amante’ un magnate o una dama de sangre antigua, ambos maduros. Pero el término le está casi vedado, si no se quiere echar énfasis, a quien es joven o, sin serlo mucho, tiene un IRPF negativo o de risa. A veces, el vocablo enfatiza la pericia en el enpalme, y entonces sí, en un nivel culto se admite calificar a alguien de buen o buena ‘amante’ incluso al esposo o a la esposa que lo afrontan con arte encomiable.”

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sábado, 22 de junio de 2019


Palabra cazada: amante

Dice Lázaro Carreter:

“Es muy frágil el suelo de los enamorados, ya sean de larga duración o de usar y tirar. Idiomáticamente  quiero decir: nunca habían estado tan inseguros los modos de nombrarlos. Fue firme durante siglos el vocablo ‘amante’, tomado del latín en el siglo XV, directamente o mediante el italiano. Era la persona que amaba, normalmente el hombre; la mujer era la ‘amada’. El término no enjuiciaba la calidad del amor: iba desde el de  baja y sustanciosa estofa hasta el místico. Por eso los diccionarios antiguos definen ‘amante’ sólo como ‘quien ama’.
Dos siglos más tarde, con la valiosa ayuda del francés, idioma siempre golfo, se había consolidado en español para designar al hombre o a la mujer (rey y reina incluidos) que, de modo casi institucional, compartían persistentemente lecho, y techo a veces, fuera del matrimonio. La Academia tuvo que rendirse a la evidencia, y, en 1899, con el aval probable de alguno de sus miembros, reconoció ‘amante’ como voz sinónima de ‘querido, -a’.Pero esta es otra historia y la misma.”

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lunes, 17 de junio de 2019


Preposición cazada: super-

Dice Lázaro Carreter:

“La preposición ‘super-‘ puede crecerle a cualquier adjetivo o sustantivo y hay miles de hablantes que se sentirían desvalidos si no ornaran sus calificaciones con ese bubón: su ligue les parece ‘superguay’, gozan de una pareja ‘muy supercálida’, y aquella lectora halló a su iguana Candy en el terrario donde dormía ‘supermuerta’. El ánimo de tales dilatadores endilga al adeverbio el añadido de moda y se sienten ‘superbién o supermal’; tal vez aún no, ‘superregular’. Es el último estadio al que ha llegado por ahora la preposición ‘super’.”

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martes, 11 de junio de 2019


Palabra cazada: supertriste

Dice Lázaro Carreter:

“Leído en la carta de una lectora a su revista: ‘Hoy hace un año que murió mi Candy y estoy supertriste’. Candy era una graciosa iguana, y eso podría haberlo escrito también un lector, por que ‘super’ es unisex; y  ambos, idénticamente podían haber dicho que estaban ‘superafligidos/as o superacongojados/as o superfastidiados/as’, si hablaban en versión de cámara y si transcribimos tales sentimientos con repugnante estilo de circular ortosexual. Esa tumescencia verbal ataca a millares de ciudadanos veinteañeros, y a una multitud talluda contagiada de su inmunodeficiencia idiomática. Estalla con vigor en los viernes de litro y jarana, pero no sólo: también brota en muy amplios sectores del ‘qualunquismo’ hispano, desde el mercadilo a la boutique, y hermana a los famosos de tele y magacín con quienes los airean con provechosa simbiosis.”

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jueves, 6 de junio de 2019


Expresión cazada: Catástrofe humanitaria

Dice Lázaro Carreter:

“En cuanto a ‘catástrofe humanitaria’, varios amigos, pensando que tengo mano en esto, escriben y me escriben exhortándome a pegar gritos; lo hice en 1994 cuando lo de Ruanda. Aquella intensa memez se ha prodigado ahora desde cumbres otánicas y gubernamentales; así como por micros y rotativas. Una tele presentó un triste grupo de kosovares en huida, diciendo que era lamentable su aspecto ‘humanitario’. La guerra no, pero algunos diarios están recuperando la cordura, y hablan ya de catástrofe ‘humana’.”

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